sábado, septiembre 23, 2006

Dafne Pidemunt

Nació en Buenos Aires en 1976

del libro El Juego de las Estatuas (2004, Yugen)

Me hacen madre en la noche
Sus juegos despedazan mi ombligo
roto el cordón umbilical
ningún juego es posible
pero mis padres son muy niños aún.
Mamá y papá nunca entendieron
que eran ellos quienes jugaban en mi infancia
que era yo quien se desvelaba en las noches
quien los tapaba al dormir
y les cantaba.

.

Ella no me ama a mí.
Ella ama mi palabra, mi juego.
Poeta nacida de vientre judío
Juego con una religión desconocida
Le digo en idish cosas que no entiendo
En castellano.
Lo que sea por otra noche en tus brazos
Lo que sea por otro beso en mis pálidos labios.
-Querés palabras?-le dije
Jamás se detuvo en las palabras que no po-
drían nunca bucear por su sexo
Como lo hace mi física lengua.
-¡Más poemas pequeña!, ¡Más poemas!-
me exigía cada noche al dormirse en mis bra-
zos
-O se ama o se escribe.
Amor y literatura no deben tocarse-
Ella sabe y no le importa.

Poeta nacida de vientre judío


y ah, suspiro mediante
comienzo el poema
que dire esta noche

.

Tuve un amor sagrado.
¿Quién se anima a batirse a duelo con la muer-
te después de haber amado?
Sigo jugando con mis patas rotas
la danza de las estatuas
al filo del ojo de quien las contempla.
El dolor llega hasta el umbral de la mirada.

En el juego de las estatuas
las piernas bailan y corren lastimadas por la
caída.
¿se animaría el que cuenta hasta tres
a darse vuelta y observar a los jugadores?

La tarde cae en mis ojos ancianos.

Ya he jugado a las estatuas,
ya he amado
¿Que más pedirle al dolor de envejecer;
si mis recuerdos resuenan en la noche
como el tambor del niño que no quería crecer
y se quedaba enano?

MADRE

El consuelo de escribir.
Mi madre se emborracha. Una y otra vez la
asesino.
Muerta, resucitada, continúa suicidándose.
Piesno en la música, trato de no llorar,
la máquina de escribir repite los mismos erro-
res en la misma tecla, mi madre tipea. A lo
lejos yo la observo;
vaya coincidencia, al igual que la máquina yo
repito siempre los mismos errores que mi ma-
dre, en las mismas situaciones.
me emborracho, me asesinan, resucito. me sui-
cido.
Y mi madre a la par mía vive con el consuelo
de escribir,
imitándome.

7 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Es una gran escritora, una excelente poeta

10:50 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

La conocí, por Causa y Efecto, en La Giralda. No puedo ubicar su mail, si alguien lo sabe y puede pasármelo, estaré agradecida. Coincido con Diego Arbit, es una excelente poeta. Su poesía está plagada de imágenes, imágenes que se construyen desde una sensibilidad gigante, desde una honestidad precisa y, a veces, asfixiante pero extremadamente necesaria.

Saludos,
Majo L.T.

lopeztavani@yahoo.com.ar

5:46 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

biografia hecha poesia.estilo descarnado pero que no descuida la belleza. Tu inspiración ,para mi, deberia buscar otras fuentes, ademas del pasado doloroso.Recordá lo que le sucedio a la mujer de Lot.que se convirtió en estatua de sal esta en los cuadros de Rubens y Corot."salva tu vida,no mires hacia atrás" genésis,capitulo 19,versículo 17.

4:08 p. m.  
Blogger A.C. said...

(despedazan la esencia delicada del rocío, para hacerlo crudeza pura y estética)

un placer leerla y reencontrarla así de diferente entre otro tipo de vegetación...

4:34 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

hola, bien, dafne, poesia, a tus pies

1:41 p. m.  
Blogger gus-alonso said...

Conmovedor Poema de una escritora que en su narracion, transparente y viceral. Cuenta una realidad que no es agena.
Gracias Dafne.
Gus.

1:53 a. m.  
Blogger Nick Saver said...

Hola Dfne!!, Soy Sebastian, El papa de Ciro, de San Marcos, te acordas?.

Espero que estes bien y que te haya ido bien en tu viaje.

Gracias por derramar tu poesia, amuchos ( como esa noche en la feria del libro independiente ), podra no gustarle. pero la criitica te hace mas sabia, seguinos escribiendo, que que tu ojos claros sigan iluminado elcamino de la ignorancia y la intolerancia. Seba

3:45 a. m.  

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